Es muy triste ver en estos meses de tantos recortes sociales, el estado de animo de los más desfavorecidos. Nos fijamos más en los más vulnerables, como en los ancianos y los niños. Pero hay otro colectivo quizás el más extenso, que es el de los jóvenes que les perjudica todo. La falta de trabajo, más el resto de los recortes en particular. Es sangrante las brutales subidas en el transporte publico. Es materialmente imposible su movilidad, o bien para buscar trabajo o estudiar, y no digamos cuando quieren divertirse un poco, vale más el transporte publico que las copas. No los están dejando otro camino que emigrar a la revolución.
Saludos a todos, que el Universo nos proteja.